miércoles, 1 de julio de 2009

Urbana Decembrina

¡Feliz navidad! Gritaron todos al llegar las doce de la noche y mientras todos se abrazaban a él, el mundo le daba vueltas, no pudo mantenerse más de pie y fue a dar de narices al suelo, rompiendo algunas guirnaldas y bolitas de cristal, es que de verdad para ese instante el arbolito de navidad ya estaba demasiado prendido.

1 comentario:

amats dijo...

Semaforos enamorados y arbolitos borrachos...qué mas se te puede ocurrir, mi querido amigo??????